Como guinda al hotel y centro de convenciones en el que se ha convertido una antigua fábrica de tejidos, al estudio Wutopia Lab le encargaron realizar una cafetería o una suite de lujo en una torre de agua en desuso. Pero Yu Ting, el arquitecto fundador, tuvo una idea mejor: honrar la memoria de la gente común, aquella capaz de actuar heroicamente en situaciones de crisis.