El complejo de usos mixtos 1000 Trees tiene dos objetivos. Por un lado, dar respuesta al incesante crecimiento urbano de Shanghái y, por otro, romper la tendencia anodina de los rascacielos que imperan en la urbe. El resultado es un coloso de hormigón que combina arquitectura y vegetación y que ha sido proyectado por el arquitecto británico Thomas Heatherwick.